FANTASMAS
A veces somos tan fantasmas que nos crece la nariz, y otras tan pragmáticos que nos olvidamos de vivir. Ahora que la lluvia nos visita, caigo en el recuerdo de aquellos otoños, donde disimulábamos qué importaba quienes éramos tú y yo. Los días pasan y a veces ocultamos el dolor, refugiados en mentiras que nos hacen reir a solas. Son tus besos los que me hacen regresar una y otra vez, cayendo en la trampa de tu piel.

Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
Se me acaba de ocurrir una idea, pero la voy a poner en práctica muy despacio. Pregúntame dentro de unos años...
No hay comentarios:
Publicar un comentario